Coord. interinstitucional local en gestión de SAN

  La coordinación interinstitucional local en la gestión de la seguridad   alimentaria y nutricional –SAN-

 

Rolando Alonzo Gutiérrez

Profesor-Investigador DITSO.

 

              Es a nivel regional/local y en la diversidad de los territorios, donde se palpa con mayor crudeza el problema de la seguridad alimentaria y nutricional –SAN-.  Por lo que gestionar programas o proyectos adaptados a los contextos particulares ayudaría a solucionar este flagelo. De ahí la importancia de considerar el enfoque de desarrollo local-territorial y la gestión social en la ejecución de políticas, planes, programas y proyectos de SAN.

Un aspecto preocupante de la SAN en Guatemala, es la pérdida de la capacidad de producir alimentos, a pesar de ser considerado un país eminentemente agrícola.  Es decir que la agricultura está perdiendo importancia en la economía y están ganando las actividades de comercio, servicios, banca y finanzas.   

Lo anterior es efecto del modelo de desarrollo neoliberal que le ha dado mayor importancia a la producción para el mercado externo, en deterioro de la industria nacional y de la agricultura familiar para garantizar la SAN.  Esto ha hecho que algunas organizaciones de sociedad civil hablen de soberanía alimentaria. 

En esta situación del país, es de observar como a nivel local (y regional) se están llevando a cabo programas y proyectos de SAN bajo el marco de la política de seguridad alimentaria y nutricional del gobierno central.  Un punto fundamental para la implementación de estos programas y proyectos es la coordinación interinstitucional, que tiene diversas fallas debido a factores de índole económico, social, político, cultural y ambiental. 

En lo político e institucional las diversas entidades sectoriales involucradas (salud –MSPAS-, analfabetismo –CONALFA-, desarrollo social –MIDES-, seguridad alimentaria –SESAN-, agricultura –MAGA-), que tienen la facultad dada por ley para gestionar SAN, manifiestan problemas de rigidez, centralización y concentración para llevar a cabo sus actividades, lo que no facilita la coordinación interinstitucional a nivel local. 

Por su parte, los gobiernos municipales tienen la facultad, según el Código Municipal, de creación de infraestructura en agua y saneamiento, desechos sólidos, mercados y proyectos económicos en favor de la mujer, es decir, tienen una contribución directa en salud, educación, producción alimentaria, entre otras.  Sin embargo, las obras municipales que realizan les falta mayor relación con SAN en su diseño y ejecución.  A parte que la mayoría de ellas es obra gris,

dejando de lado proyectos de participación ciudadana, de fortalecimiento institucional, fomento económico, entre otros.

              Otro aspecto, de carácter político, es la injerencia de los diputados distritales en la ejecución de las actividades de las diferentes entidades sectoriales del organismo ejecutivo, principalmente, en la distribución de recursos para proyectos económicos, nombramiento de delegados o delegadas municipales de las entidades sectoriales, distribución no equitativa de recursos financieros en los Consejos Departamentales de Desarrollo según municipios priorizados en situación de desnutrición.

Finalmente, en la gestión de SAN predomina un enfoque sectorial, centralizado y asistencialista con fuerte injerencia de la política partidista (clientelismo), ante la realidad de los territorios que reclama un enfoque territorial, descentralizado y de fomento de la participación ciudadana en procesos de autogestión de la seguridad alimentaria y nutricional.